Visita fuera de casa
Gastón Monge/2191
El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, se reunirá con el lunes en la ciudad de Laredo, Texas, con el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, para hablar de asuntos comunes entre Texas y Tamaulipas, como el medio ambiente, la cooperación económica y migración, pero en la agenda de ambos al parecer no se ubica el tema de la inseguridad que afecta a los países.
En Estados Unidos los tiroteos a diestra y siniestra de sujetos desquiciados son el pan de cada día sin que ninguna autoridad o gobierno haga algo para frenar la violencia por la torpe inmunidad que la Segunda Enmienda otorga a los norteamericanos para portar todo tipo de armas y, disparar contra todo lo que se les ocurra.
A ello se suma un clima de intolerancia ante la migración indocumentada que ya ha rayado en la violencia contra ciudadanos no sajones, que no hablan inglés y que por su apariencia física evidencian su origen hispano o mexicano.
Al parecer en la plática no se tocará el tema de la inseguridad y la violencia que vive Tamaulipas y casi todo el país, derivado de una equivocada y torpe política gubernamental que tolera y no combate a quienes son los generadores de esta violencia.
Tal parece que ambos políticos son ajenos a lo que ocurre en sus respectivos países, y más el tamaulipeco que parece ignorar lo que ocurre en su propio Estado en donde la inseguridad ya tocó a la puerta del propio mandatario con el atentado a su secretario de gobierno hace una semana.
Pero la sombra de la inseguridad ya pisa terreno en casi toda la geografía tamaulipeca con una serie de delitos que al gobernador parece no inmutarle, y claro, cómo puede incomodarse con todo ese ejército de guarda espaldas que lo protegen día y noche.
Hace unos días estuvo de visita en la ciudad de México, y de acuerdo al reporte de un noticiero nacional conducido por Óscar Mario Beteta, se le vio desayunando en un conocido restaurante de la capital, acompañado de dos personas y 7 guardias dentro del lugar, mientras afuera del mismo cerca de 25 militares cuidaban, pero ¿de qué tiene miedo este gobernador? ¿Cuánto nos cuesta esta brutal seguridad personal, cuando miles de tamaulipecos son víctimas de todo tipo de delitos sin que nadie los cuide?
Ya es una costumbre que el gobernador cuando sale de gira por Tamaulipas, no tiene roce con el pueblo, ese pueblo que dice lo apoya y que le dio el voto, porque sus visitas son secretas y sin avisar a la prensa, tal vez porque no le gusta que le hagan preguntas o lo cuestionen sobre el tema de la inseguridad, sí, tal vez.
Cuando viene a Nuevo Laredo no se avisa a la prensa, viene en secreto, temeroso, irónico y con otros datos de la inseguridad que reina en su Estado.
La visita del próximo lunes será en otro país y en otra ciudad, lo que a simple vista es un desdén y una ofensa a los tamaulipecos, porque su obligación como gobernante es visitar Nuevo Laredo y convocar aquí a rueda de prensa y no hacerlo en Laredo, Texas. Una vez más se nota ese desdén hacia la prensa, y ese rechazo a ser cuestionado sobre un tema en el que ha fallado, porque la inseguridad lejos de aminorar, aumenta a cada momento en Tamaulipas, y como muestra está su impresionante aparato de seguridad.
——————————————
La muerte de una niña de 6 años en un hospital del Imss de Playa del Carmen, debido a una terrible falla en el elevador al que se le subió para su traslado a estudios médicos, no solo fue un acto de negligencia médica y administrativa, sino un caso en el que las autoridades deberían investigar más a fondo para saber en qué se invirtieron esos más de 200 millones de pesos para la compra de estos aparatos que al parecer nunca llegaron a su destino.
Este asunto lo debe saber muy bien el director general de este instituto, Zoe Robledo, quien anda más preocupado y ocupado por ganarse la confianza del presidente López Obrador para que lo tome en cuenta como posible candidato para gobernar Chiapas, mientras los derechohabientes sufren de todo tipo de negligencia en los hospitales que tiene bajo su tutela en todo el país.
Por cierto, al parecer la empresa Soluciones Integrales en Transportación Vertical en Mexico (Sutravem) es la misma empresa que contrató el gobierno de la ciudad de México para el mantenimiento de las instalaciones del metro. Saque usted sus conclusiones.
En la clínica 78 de Nuevo Laredo los pacientes, sus familiares y los derechohabientes que acuden a consulta médica, tienen que soportar un calor de más de 40 grados dentro de la clínica, porque no cuenta con aire acondicionado, a diferencia de la dirección, la subdirección y las áreas administrativas en donde el personal goza de un clima fabuloso. ¿Qué los derechos de los pacientes no son una prioridad por encima de los empleados y los directivos? Al menos eso reza en cada consultorio en donde se cita en sus paredes el decálogo de los derechos de los pacientes, que por ciento nadie respeta.
Pero los médicos también se quejan de que no les dan hojas para las recetas, las impresoras no tienen tinta, no pueden enviar a estudios especializados porque no hay reactivos ni ciertas medicinas de especialidad. ¡Ah!, y los elevadores también fallan en este lugar, lo que por lógica mantiene a los médicos malhumorados, y como siempre, son los pacientes quienes la llevan en todo.
——————————–
Voz migrante. A pesar de que miles de migrantes de diferentes países siguen llegando a México por diferentes rutas y de muchas maneras, tanto en Estados Unidos como en México existe un serio problema de falta de mano de obra calificada para el trabajo, sobre todo el especializado en algunas áreas muy específicas, lo que ya es un reto que ambos países deben enfrentar, mientras se deciden a ‘legalizar’ o no esta mano de obra ávida de ser contratada.
Y es que entre esos miles de migrantes que se encuentran estacionados en las dos fronteras de México, hay una rica fuente de conocimientos y habilidades que están siendo desaprovechadas por los gobiernos de ambos países, toda vez que quienes nos dedicamos al periodismo social nos hemos dado cuenta de que el 90 por ciento de los migrantes son jóvenes, hombres y mujeres menores de 35 años de edad, y de todos ellos más de la mitad cuenta con alguna profesión terminada o trunca, pero con estudios universitarios o una capacitación para el trabajo, técnica, tecnológica o científica que son desaprovechadas.
Ya el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) tiene la idea de proponer al gobierno mexicano la regularización de esos migrantes que pudieran quedarse en México a trabajar mediante contratos temporales o definitivos, con lo que se reduciría la presión que la migración por sí misma ejerce sobre el gobierno mexicano, además de evitar con ello su inserción a las filas de la delincuencia, reducir los niveles de inseguridad y alentar a quienes deseen activar algún negocio, a que se inserten en el plano de la legalidad pagando impuestos y recibiendo incentivos de diversos tipos.
La tarea no es nada fácil pero es posible si el gobierno federal coadyuvando con los gobiernos estatales, deciden dedicar parte de sus recursos en la creación de un gran Atlas Cultural, Económico, Político y Social de los migrantes, cuyos especialistas se dediquen a la identificación de estos migrantes para orientarlos al trabajo productivo en empresas y negocios que requieran de este tipo de mano de obra, lo que aliviaría también la enorme presión que existe en los municipios del norte de México adonde convergen todos los migrantes por su deseo de cruzar la frontera.
Este Atlas sería binacional con el compromiso de que los dos gobiernos se comprometan no solo a otorgar visas humanitarias sino permisos temporales de trabajo especializado que tanta falta hace en los dos países.
Este planteamiento lo entregué hace tiempo al Instituto Nacional de Migración a petición suya durante un foro sobre el tema migratorio al que fui invitado a participar como ponente, pero ignoro su destino.
———————–
Hasta mañana
gastoneligiomonge@hotmail.com
gastoneligio@gmail.com