Visita esperada
Gastón Monge/2181
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador realiza una visita de supervisión por las aduanas de Matamoros, de Reynosa y de Nuevo Laredo, con la finalidad de recoger el testimonio de su funcionamiento en las dos primeras, y de iniciar con los avances de la construcción de lo que serán las nuevas instalaciones de la Agencia Nacional de Aduanas de México (Anam) en Nuevo Laredo, entidad federal que aglutina a las 50 aduanas marítimas y terrestres que hay en el país.
Este sábado supervisa las aduanas de Matamoros y de Reynosa, mientras que mañana domingo estará en esta frontera para visitar el puente internacional tres y ver la posibilidad, tal vez, de su ampliación, porque es un hecho que no será construido un cuarto puente internacional, al menos no pronto.
El mandatario visitará los terrenos en donde estarán algunas de las oficinas más importantes de la Anam, sobre todo las relacionadas con el comercio internacional, porque no toda la infraestructura se trasladará a esta ciudad, una mediana urbe que no cuenta con modernas vialidades pero sí con una urbanidad deficiente para dar cabida a una entidad de ese tamaño, además carece de buenas y suficientes universidades, centros comerciales de primer nivel y aptos para una clase media aspiracionista como la que trabaja en dicha dependencia.
Esta ciudad no cuenta tampoco con atractivos ni distractores recreativos suficientes para familias jóvenes similares a los que están acostumbrados los empleados de la Anam en la ciudad de México. No hay grandes almacenes, se carece de centros recreativos y de plazas comerciales como las que hay en la ciudad de México, y la lejanía con las ciudades que cuentan con ello, como Monterrey y San Antonio, podrían hacer casi imposible la vida cotidiana de los empleados que tengan que venir a radicar a esta ciudad.
Pero la visita de AMLO también será para reunirse con el Consejo de Seguridad Estatal para analizar lo relacionado con la inseguridad que desde hace dos semanas ha convertido el norte de Tamaulipas en campo de batalla entre grupos criminales y las fuerzas federales y estatales del orden.
En su visita verá que sus estrategia de ‘Abrazos y no Balazos’ no ha funcionado, y por el contrario ha incrementado los niveles de inseguridad y de temor entre la población, al grado de que Estados Unidos haya prendido las alertas para sus ciudadanos, de no visitar esta parte de México.
Sería muy bueno que su traslado desde la ciudad de Reynosa a Nuevo Laredo lo hiciera por la peligrosa carretera Ribereña, convertida desde hace muchos años en campo de batalla. Le serviría para tener una noción más adecuada de la realidad que se vive en Tamaulipas en materia de seguridad pública.
Las estadísticas no mienten; durante el gobierno de AMLO la tasa de crímenes violentos, relacionado o no con el narcotráfico son más altas que durante las anteriores administraciones federales, al llegar ya a la cifra de 150 mil homicidios, una cifra aterradora.
Es posible que durante su visita a las aduanas fronterizas de Tamaulipas, la número uno y la número 4 a nivel nacional, haga más nombramientos para colocar militares en los mandos medios y superiores de las aduanas, para cerrar el círculo en cuanto al control de todas las operaciones comerciales y de logística con Estados Unidos y Canadá, aunque tal vez algo positivo haya en ello, y es la posibilidad de que se combata el tráfico de armas a México, además del tráfico de drogas hacia Estados Unidos.
AMLO estará hoy a las 16:45 horas en la aduana de Matamoros, y mañana visitará la aduana de Reynosa a las 10:30 horas, viajará a Nuevo Laredo para estar en el puente internacional tres, y de allí visitar los terrenos donde estará la Anam, al filo de las 13:15 horas.
Sin duda alguna que la visita del presidente de la República genera muchas expectativas positivas para Nuevo Laredo, y la más importante es que la instalación de la Anam será el punto de partida hacia un mejor y mayor desarrollo que tanta falta le hace a esta ciudad.
Pero esta es también u a gran oportunidad para que los chicos que estudian las carreras de Comercio Internacional, Administración de Negocios, Contador Público y carreras afines a las operaciones comerciales internacionales, se alisten porque de seguro habrá contratación de personal, y esta sería una gran oportunidad para ellos. Esperemos que así sea.
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Quien de seguro está muy contenta con la visita del presidente López Obrador, es la alcaldesa de Nuevo Laredo, Carmen Lilia Canturosas, por tener la oportunidad de platicar con el mandatario y con el gobernador Américo Villarreal, de temas relacionados con el desarrollo de esta ciudad.
Tal vez por eso desde hace varias semanas la funcionaria trabaja de manera importante en la promoción de la ciudad mediante la celebración de algunos eventos dedicados también a una mayor reactivación de la economía local.
Carmen Lilia tiene la gran oportunidad de proyectarse políticamente hacia una posible reelección si continúa trabajando de la mano con el gobernador Américo Villarreal, quien la ha mostrado últimamente simpatía por el trabajo que desempeña, sinergia que debe aprovechar al máximo para impulsar las actividades comerciales, las inversiones directas y, sobre todo buscar siempre el apoyo de los gobiernos federal y estatal para consolidar a Nuevo Laredo no solo como la primera aduana del país, sino como tierra promisoria para futuras inversiones.
La funcionaria lo mismo promueve espectáculos musicales, como actividades comerciales y de gastronomía, y lo hace con sus similares de la vecina Laredo, en proyectos binacionales como la vacunación transfronteriza.
Su trabajo se refleja ya en algunas encuestas que la mantienen entre los primeros sitios de aceptación, encuestas realizadas en varios municipios entre los que destaca la alcaldesa. Varios pueden ser los factores para que esta aceptación sea validada por las encuestadoras.
Puede ser su dinámica como mujer emprendedora, su liderazgo, su trabajo, o el empoderamiento que promueve entre las mujeres de esta ciudad que buscan siempre su desarrollo e independencia personal. Puede ser alguno de estos elementos, o todos juntos.
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Voz migrante. El llamado ‘Día D’ ya llegó, pero no por ello terminará la pesadilla para los migrantes que desean ingresar a Estados Unidos de manera indocumentada, porque la historia de terror continuará con el Título 8, un programa más agresivo, más racista, menos tolerante, menos humanista y más efectivo en cuanto a la deportación fast track a México.
Al término del Título 42 surgen de inmediato muchas interrogantes con relación a lo que ocurrirá con los deportados cuyo destino inmediato será México ya convertido en tercer país, y con muchas posibilidades de que se genere una crisis migratoria de dimensiones aún no previstas, dada la gran cantidad de deportados que hacinarán los municipios fronterizos, sin que Estados Unidos aporte absolutamente nada para paliar los serios problemas que las deportaciones masivas le provocarán a México.
Ahora los migrantes están más expuestos a ser víctimas de los traficantes, los que aumentaron sus cuotas para llegar a la frontera norte de México, y con las restricciones de México al acatar las recomendaciones del presidente Biden, de enviar militares y a la Guardia Nacional a la frontera sur, los peligros serán más constantes porque se internarán por rutas más alejadas y más peligrosas.
Ante esta nueva realidad algunas organizaciones de derechos humanos y protectoras de migrantes advierten sobre estos riesgos, amén de los que enfrentarán si cruzan la frontera, ya que pueden ser procesados penalmente por las autoridades norteamericanas al no tener la oportunidad de acudir con un abogado o de apelar, porque ser indocumentado es un delito, aunque conceptualmente este término esté mal aplicado, ya que no se trata de delincuentes, sino de personas sin documentos para vivir o para trabajar en Estados Unidos, lo que deberá ser seriamente analizado por los expertos en reuniones binacionales para quitarles ese estigma a los migrantes.
Se estima que a lo largo de la frontera norte de México hay poco más de 70 mil migrantes de más de 100 países, tan solo en ciudad Juárez y en Tijuana se concentra casi la mitad, y lo peor es que en Texas el gobernador republicano Greg Abbot ya adiestró a la policía estatal para detener y deportar de inmediato a los migrantes mediante la aplicación de la fuerza y la violencia.
Adicionalmente no hay recursos económicos ni humanos como para poder brindar una atención adecuada a los migrantes estacionados en la frontera norte del país, sumado a los deportados que calificaron para una cita, y los 30 mil que cada mes deberá recibir México como parte de un acuerdo binacional.
La confusión es enorme y es el inicio de una severa crisis migratoria que se avecina y de la que Estados Unidos se deslinda pese a ser corresponsable en este asunto que puede ocasionar más abusos, más violaciones a los derechos humanos y, posiblemente más muertes, porque no existen ni siquiera intentos para elaborar un proyecto integral para la atención de los migrantes, ni mucho menos la intención de una reforma migratoria, ni en México ni mucho menos en Estados Unidos, debido a la cercanía de las elecciones federales en ambos países.
Se avecinan tiempos muy difíciles para la migración forzada. Posiblemente habrá más restricciones a la migración indocumentada y más agresiones verbales de parte de los republicanos estadounidenses, como el racista senador John Neely Kennedy y los gobernadores de Texas y de Arizona, que agravarán aún más esta crisis, toda vez que México ya es un Tercer País al haber aceptado el programa ‘Quédate en México’, para el que no está preparado.
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