Agua que no has de
beber, no la dejes correr
* – . Crisis del agua en la mayor parte del país, galopa cual jinete apocalíptico
* – . Aquella propuesta de una represa del empresario Enrique Reséndez Cuellar
* – . Un ganadero advirtió hace casi 20 años, que el agua sería la nueva moneda
Por Javier Claudio
Claroscuro. – Si ya hace tres años se comenzaban a vivir los efectos de una descomposición social, hoy el descaro de la violencia parece que nos hiciera ver con más incertidumbre que nunca, qué hay más allá. La grave falta de agua que padece Monterrey, como efecto inmediato de una prolongada ausencia de lluvias en la región, ha propiciado lo que han llamado escenas apocalípticas, donde se toma el vital líquido de donde se pude y como se puede. Ah, y se le endilga al gobernador Samuel García.
Claridades. – Cuidado con la desesperación ciudadana, pues luego de más de una semana sin agua, vecinos de la colonia Arcadia, en el municipio de Juárez, irrumpieron en un tinaco de Agua y Drenaje de Monterrey, Nuevo León, el cual saquearon a tal punto de provocar que una tubería se viera dañada. La consecuencia fue un derrame de aproximado de 200 mil litros de vital líquido, hecho que perjudicó a familias de sectores aledaños. Esta falla pudo aliviar la sed de al menos mil personas.
Clarín. – Con esta severa crisis de agua, recordamos al productor de ganado y empresario don José “Pepe” Salvador Guzmán Garza, que también fue presidente de la Asociación Ganadera de Nuevo Laredo-Ciudad Guerrero (1996-1998-2000), al advertir entonces que no estábamos muy lejos de enfrentar una crisis de agua y que sería tal que, hasta figuraría como moneda de trueque en un determinado momento. Hoy la presa La Amistad registra un 26.2 por ciento, casi 08 porcentuales menos que en inicio de año.
Claro que no. – No fue tan descabellada la idea del empresario Enrique Reséndez Cuéllar, quien propuso que hacia la parte de arriba del río Bravo fuera construida una represa a fin de almacenar agua durante época de lluvias, esto con la finalidad de prevenir faltante de agua a causa de las sequías. Se sabe que la creación de una represa es tan o más difícil de gestionar con EU que un puente internacional, más aún que los derechos de propiedad del agua son en su mayor parte del vecino.
Claro que sí. – La crisis del agua es seria, luego que el 70 por ciento del territorio tamaulipeco se encuentra sumergido en una crisis de sequía, luego que la demanda por el vital líquido es mayor que la disponible. Tamaulipas sería la 15va. entidad en semáforo rojo de disponibilidad de agua. Los municipios de Matamoros, Río Bravo, en la frontera norte, Padilla, Güémez, Ciudad Victoria, Jaumave, Palmillas, Tula, se encuentran con un riesgo extremadamente alto de no contar más con agua potable.
Clarificando. – Los datos más recientes de la Comisión Internacional de Límites Y Aguas (CILA), observan con preocupación que actualmente las siete principales presas de Tamaulipas que acumulan agua para el consumo humano o el agrícola promedian apenas en total 40 por ciento de su capacidad de almacenamiento, situación que es más crítica en la presa “Guerrero” del municipio de Padilla, misma que abastece a Cd. Victoria con 21 por ciento de su capacidad de almacenamiento.
Aclarando. – Ante el cierre del ciclo escolar, sin duda que se hace efectivo con toda discrecionalidad aquello que reza; “a río revuelto ganancia de pescadores”, sobre todo en las escuelas particulares, donde anticipadamente concluyeron las clases, para imbuirse los maestros en una serie de festividades de todo tipo, donde a los alumnos se les entretiene de evento en evento –de todo tipo– y los padres no se dan abasto para solventar gastos que va desde disfraces hasta cuotas por diversas cantidades.
Sabía usted que. – Los empresarios que aglutina la Cámara Nacional de la Industria Restaurantera y Alimentos Condimentados (CANIRAC)de Nuevo Laredo no son la excepción en enfrentar efectos severos de la inflación acumulada en el año, al enfrentar, como principio de este problema que tiende a acentuarse, un fuerte desabasto de materia prima y especulación en precios de diversos productos. La reacción inminente es un aumento de precios en los platillos a partir de julio, el que ya se estima por acuerdo de socios restauranteros de un 10 por ciento.