MIGUEL TIMOSHENKOV
LAREDO, TX. – El tema de la violencia doméstica no termina en la ciudad y Casa Misericordia por 27 años ha mantenido abiertas sus puertas para lidiar con el problema social y atender a las víctimas.
Las 24 horas de cada día el refugio arropa a mujeres y niños que enfrentan el flagelo de las agresiones físicas y verbales, resume Sister Rosemary Welch.
“Hemos avanzado generando una cultura de autodefensa de los más débiles”, dijo Sister Welch. “Anualmente atendemos cientos de casos. Después de la reflexión las mujeres toman sus propias decisiones para seguir en sus vidas”.
Dijo que hay mujeres que decidieron terminar con la continuidad de agresiones y ahora configuraron una vida, transitan en sus habilidades y algunas de ellas en negocios propios.
Asume que es un tema muy delicado y que muchas ocasiones las mujeres piensan más en sus hijos que en ellas mismas.
Casa Misericordia estará abierta para recibir a las mujeres que deseen buscar alternativas de vida.
El refugio las orienta a encontrarse a sí mismas en una actividad productiva.
Las decisiones las toman ellas, porque es como podrán abandonar la inestabilidad que han vivido.
Sister Welch acepta que no es tarea fácil para las víctimas de la violencia.
En reciente informe, el jefe la policía Miguel Rodriguez destacó que más de 800 llamadas de violencia doméstica se habrían atendido y la policía siempre estará disponible para atender los llamados de las víctimas.