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MIGUEL TIMOSHENKOV.
LAREDO, TX. – Se alertó a automovilistas que el regreso a clase seria extremadamente vigilado, pero decenas circulaban por espacios educacionales y no obedecieron reglas.
La policía de Laredo, escolar y otros organismos de seguridad enforzaron leyes de tráfico
Porque fue comienzo educativo de intensa movilidad se registró el miércoles en 33 edificios para recibir a 21 mil alumnos, cuatro mil docentes y administrativos de Laredo ISD
Padres de familia llegaron con anticipación a recintos educativos porque querían asegurarse de que sus hijos ingresaban a las aulas, conocer a sus profesores e identificar el ambiente que reinará en el ciclo 2023-2024.
En las calles principales y aledañas a las 33 escuelas se intensificó la vigilancia policial en patrullas y motocicletas. En algunos casos se entregaron infracciones porque conductores no respetaron la velocidad de 20 millas por hora, así como otros conducían distraídos en el teléfono.
Maggie Martínez, asistente de la superintendente de LISD, dijo que fue una asistencia a clases motivadora de los estudiantes.
“Una de las preocupaciones de todos es la seguridad. Cumpliendo con las normativas de la legislatura tendremos un policía armado en cada escuela”, dijo Martinez. “Los oficiales estarán en primarias, secundarias y preparatorias”.
Martinez dijo que alumnos para el grado nueve recibieron sus nuevas computadoras que tendrán disponibilidad diaria durante el periodo educativo.
Los policías estuvieron vigilando los puntos de ascenso de alumnos a la flota de autobuses que les concentra a los centros educativos.
Se trabajó en un plan comprensivo donde policías, educadores y personal escolar tenían acceso a información alentados por un nuevo comienzo y acceso.
La policía indicaba a los automovilistas que tuvieran paciencia, que los próximos días habrá mayor carga vehicular en las calles y que si deben llegar a sus trabajos deberán prepararse desde una hora antes.