-A Morena le quedan nueve meses para dar resultados
-Debe pasar de los dichos a los hechos
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Raúl Hernández Moreno
El Tribunal Electoral de Tamaulipas (TRIELTAM) declaró improcedente la solicitud del Partido Acción Nacional para que se le regresara la Junta de Coordinación Política del Congreso, figura jurídica que Morena desapareció y la sustituyó por una Junta de Gobierno.
El TRIELTAM determinó que no puede detener el trabajo del Congreso, porque sería asumir una facultad que no tiene.
Con ello el diputado neolaredese Félix El Moyo García, no regresa a la coordinación y eso es lo correcto. Es una vergüenza que este sujeto exija ser el líder del Congreso cuando el PAN es minoría y tiene solo nueve diputados.
¿Nueve contra 36? Solo alguien con mentalidad de bandido buscaría apoderarse por la fuerza de algo que por derecho legal y moral no le corresponde.
La bancada panista todavía tuvo el descaro de culpar a Morena de presionar a una de las magistradas para obligarla a desechar la solicitud.
Vergüenza debería darles promover este recurso cuando no tuvieron el voto de los ciudadanos en las urnas.
Cuando el PAN tuvo el control del Congreso hizo lo que quiso. No le importaron los tamaulipecos, sino escuchar y atender la voz del amo. Hoy todavía siguen haciéndolo, pero ya no son mayoría y no pueden imponerse.
Morena debió tener el control del Congreso desde el primer día del inicio de la legislatura y si el Moyo le robó la dirigencia a Armando Zertuche Zuani durante varios meses, fue porque el ex gobernador Francisco García compro diputados.
Morena debió ser más selectivo con sus diputados. No es posible postular a personajes sin principios que además la miseria en la que viven los obliga a estar pensando cómo ganarse un peso extra, más que en cumplir con sus obligaciones ciudadanas.
Con este fallo, Morena tiene que aprovechar los nueve meses que restan a la actual legislatura para apoyar la administración de Américo Villareal.
Deben también tener una estrategia para retener el Congreso en las elecciones de junio del año próximo. Ser el partido en el gobierno le da muchas ventajas, pero el triunfo no será automático, tienen que convencer a la ciudadanía de que vale la pena votar por Morena.
Hasta ahora hemos visto a una bancada morenista a la que le gusta la estridencia. Convocan al Congreso al Fiscal Anticorrupción, al Auditor Superior de Estado, al Fiscal General y no pasa nada.
Acuerdan presentar una queja en contra de los diputados federales y estatales del PAN por gandallas y groseros, y no pasa nada.
Acuerdan presentar una queja contra el juez federal Faustino Gutiérrez por ser defensor de oficio de Cabeza, y no pasa nada.
Morena debe pasar de los dichos a los hechos. En vez de gritos, debe dar resultados. ¿Será mucho pedir?