PRI bajo el síndrome
lópezobradorista
• – . Culpar al pasado es el estilo ahora del presente, igual deja atrás la reconciliación
• – . La detención de El Mayo y Joaquín Guzmán, en el toque de descrédito a México
• – . Entre las cenizas, siguen los pleitos en el PRI y le echan hasta Chuy Valdez (+)
Por Javier Claudio
Aclarando. – Sacude la detención tan aparentemente simple y/o tal vez con mucha estrategia silenciosa del reconocido narcotraficantes Ismael “El Mayo” Zambada García y Joaquín Guzmán López, uno de los hijos de “El Chapo”, al ser detenidos el pasado jueves por agentes de la DEA luego de aterrizar en una avioneta en el Aeropuerto de Santa Teresa, Nuevo México, una acción que aparente una entrega voluntaria de los delincuentes, pero que ya se aclara “fue en contra de su voluntad”.
Claridades. – Detener dos cabecillas del mundo del narcotráfico no es nada fácil y en tanto se cuestiona si fue voluntario, más suena congruente que al menos hubo un gran engaño de por medio, así también que las autoridades de México sostienen su imagen de que “la virgen les habla” donde cabría también que de no tener participación en la detención Marina y Sedena, sería todo un descrédito que iría más allá, pues ni por atención, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue avisado de operativo.
Clarificando. – Del PRI bien se sabe que sólo quedan cenizas, luego de ser consumido ambiciosamente por la traición, principalmente. En una reciente reunión de entre los pocos, surgieron de nueva cuenta los rescoldos contra quienes tuvieron el poder en su momento, se amontonaron las voces, esta vez no encendidas por lo que son o fueron dentro del partido sino porque como perdedores tendrán una regiduría en la planilla Morena. Avivó el valor para echarle al pasado y quienes estuvieron al frente.
Claro que no. – Las voces fustigantes de Letty Barrera y Fernando Castillo, tuvieron como argumento la integración de la Promoción del Voto, al acusar que por culpa de ingeniero Jesús “Chuy” Valdez Zermeño (+) y su grupo de 47 líderes, el PRI en Nuevo laredo está desintegrado. Resulta del todo lamentable cómo torpemente siguen prendidos en el ayer, como si quisieran hacer efectivo el “síndrome lópezobradorista”; echar culpas al pasado para huir de la realidad y no dar soluciones.
Clarín. – Conocemos a Letty Barrea y a Fernando Villarreal, por ser siempre prestos a participar por una causa justa y se nos hace extraño que cuando se tiene la posibilidad de actuar con efectividad, hoy fustigar señalen a Chuy Valdez que ya falleció e hizo por ambos, luego que este la reincorporó e impulsó al PRI en la consideración de su gran valor y Castillo, olvida llegó al PRI por acuerdo con Valdez; se modificó la contienda para calmar los ataques de grupo que encabezaba Cristabell.
Claroscuro. – Este grupo de las y los Líderes de Chuy Valdez se les conoce como el de «Los Chuyes», donde ahora resulta que la incapacidad y el bajo resultado del PRI en la pasada contienda electoral de Fernando Castillo, éste culpa a este grupo por no haber participado directamente en el Partido. Ya déjense de restregar el pasado para colgarle culpas. No tiene caso y sí sería más constructivo que tras un inteligente “borrón y cuenta nueva” saquen la casta, llamen a la reconciliación y todo vaya por la unidad.
Claro que sí. – Todavía no ocupan la regiduría y ya andan “inflados” y no les ha bastado que nada más de entrada dividieron y purgaron al PRI, sino que ahora pareciera que los están financiero para barrer cenizas. Juana María Ayala era quien el activismo del PRI la quería en la regiduría, sin embargo, el dialogo y el convencimiento de los esos “aporreados” en el tricolor, lograron convencer que se le diera el apoyo a Letty Barrera. Si el PRI está desgajado por traición y odio, La “puntilla” no debe ser suicidio.
Sabía usted que. – El capricho de construcción del Puente Solidaridad en N. León durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari, caro pagó sus consecuencias pues la Aduana de Colombia a lo largo de sus poco más de 30 años de vida apenas alcanzó a operar al 30 por ciento de su capacidad, debido a la escasa demanda del comercio internacional, que desprende a su vez de la incomodidad de su ubicación y las ventajas que ofrece el Puente III de NLD.