El aplastante poder de Morena
RAUL HERNANDEZ MORENO.
En el primer semestre de 2018 de las 32 entidades de la república, el PRI gobernaba en 14, el PAN en 11, el PRD 5, el Verde 1 y había un independiente.
Cinco años después, con las recientes elecciones, Morena tendrá 23 estados, el PAN 5, el MC 2 y el PRI 2.
Desde que Alejandro Moreno dirige al PRI, en agosto de 2019, el partido ha perdido 11 gubernaturas, ganó Durango y retuvo Coahuila. Alito es el peor dirigente que ha tenido el PRI en sus 94 años de historia.
Del 2018 a la fecha, el PRD perdió las gubernaturas de la CdMx, Tabasco, Morelos, Michoacán y Quintana Roo. En 18 estados no tiene registro estatal y por lo tanto carece de prerrogativas oficiales. Los chuchos, Jesús Zambrano y Jesús Ortega, le han dado en la madre al PRD y esperemos que así sigan, hasta que desaparezca.
El PAN perdió 6 gubernaturas durante el sexenio lopezobradorista. Conserva Yucatán, Querétaro, Chihuahua, Aguascalientes y Guanajuato y ante el torpe manejo que realiza Marko Cortés es casi seguro que en el 2024 pierda Guanajuato y en un descuido Yucatán.
Alito, Marko y Zambrano, son los peores dirigentes que han tenido el PRI, el PAN y el PRD en los tiempos recientes. Los tres se aferran al poder y a Morena le conviene que sigan ahí, pues los tres tienen empinados a sus partidos.
Con 23 estados, Morena gobernará a una población de 92 millones y el 72 por ciento del territorio; el MC dos estados, con 14.1 millones y el 10.7; el PAN cinco estados, con 16 millones, 13.5; y el PRI, dos estados, con 4.9 millones de habitantes y el 3.8 por ciento.
Luego de perder 23 estados, en cinco años, solo un iluso pensaría que el bloque opositor pueda ganar la presidencia de la república en el 2024. Desde los gobiernos estatales es donde se operan las campañas. Si el domingo pasado el bloque opositor obtuvo en EdoMex dos millones 755 mil votos, teniendo a su favor el presupuesto del gobierno de estado, -maneja 356 mil millones de pesos- en el 2024 va a tener mucho menos votos, porque ya no tendrá dinero para la compra masiva de votos.
Además de que le falte dinero, tampoco tendrá de su lado a los cuerpos policiacos que en una campaña sirven para amedrentar a los opositores.
En los últimos cinco años, Morena se convirtió, por su poder territorial, en el nuevo PRI, similar al anterior a 1988.
Teniendo a su favor el presupuesto federal y el de 23 estados, muy poco puede hacer el bloque opositor, que encima está secuestrado por Alito, Marko y Zambrano, la triada maldita que solo se ocupa en su enriquecimiento personal.
El bloque opositor ve al país como un botín de guerra.
En otro tema, el tiempo dirá qué efecto tendrá en el futuro político del senador José Ramón Gómez Leal la aplastante derrota de Morena en Coahuila.
Gómez Leal actuó como delegado de Morena en Coahuila. Ciertamente la elección estaba perdida desde que no se logró la alianza con el PT y el Verde y eso de alguna manera justifica al senador, que el próximo año buscará la reelección.
Es casi seguro que la dirigencia nacional de Morena de libertad al gobernador Américo Villarreal para que decida quiénes deben ser los candidatos a senadores por Tamaulipas.
El problema para Jr., es que también quieren ser candidatos Américo Villarreal Santiago y Carlos Canturosas Villarreal.
El futuro de Jr., es incierto.