TIEMPO DE OPINAR.

Doctorados patito.

Raúl Hernández Moreno.

Hoy que a nivel nacional se discute si la ministra Yasmín Esquivel plagió o no una tesis para obtener su licenciatura de derecho por la UNAM, nos recordó al maestro Eduardo del Río, Rius, que solo estudió hasta tercero de primaria y sin embargo escribió más de 140 libros y para lo cual se valió de comics para sintetizar los textos y hacerlos asequibles para todo el mundo.

Además, publicó varios cientos o quizá miles de historietas, de temas tan variados como biografías de Lenin, Mao, El Che, Hitler, Sandino; de historia de España, de la URSS, Cuba, Alemania; de religión, desde Jesús, la Biblia, la virgen de Guadalupe, las sectas, ateísmo, de medio ambiente, de toros, de jazz; de la revolución mexicana, la revolución femenina, de los dictadores lationamericanos, del judaísmo, de filosofía; de partidos como el PAN y el PRI y muchos temas más.

Su obra educativa fue, es y seguirá siendo tan importante que Carlos Monsiváis, dijo que en México había tres SEP: la del gobierno, Televisa y Rius.

Con todo y que José Vasconcelos, Jaime Torres Bodet y Agustín Yáñez siguen siendo los mejores titulares que ha tenido la SEP en sus 101 años de existencia, nada les envida Rius que además de que solo estudió hasta tercer año de primaria, rechazó los doctorados honoris causa que le ofrecieron en vida, algunas universidades. Como todo mundo sabía que despreciaba los títulos, dejaron de ofrecérselos; de haberlos aceptado hubiera reunido varias decenas, no solo de México, también de otros países.

Y pensar que ahora hay ignorantes que se emocionan con doctorados con un valor curricular similar a los que se venden en la plaza de Santo Domingo. Son doctorados patito.

Alguna vez el fallecido doctor en historia Manuel Ceballos Ramírez, me comentó que los doctorados solo servían para disimular lo pendejo. Por supuesto que no. Hay de doctorados a doctorados. Ahí está la tesis que para obtener su doctorado en historia realizó Jean Mayer sobre la Cristiada, la obra más completa sobre el tema, publicada hace 50 años, que además lo enamoró de México y la convirtió en su nueva patria.

No sabemos en qué terminará el caso de la magistrada Yasmín Esquivel, si fuera una plagiadora, es bastante brillante en el conocimiento del derecho. En principio pareciera que su denuncia de plagio, es un asunto político y curioso es que se le acuse 35 años después de que publicó su tesis. Insistimos, si hizo plagio, eso no le quita lo brillante como estudiosa del derecho.

Aquí en Nuevo Laredo, hubo en el Juzgado Penal del fuero común una mente brillante, don Faustino Morales, que sin ser abogado, que luego de muchos años de trabajar ahí se aprendió cientos de artículos del Código Penal, del Código de Procedimientos Penales y muchas leyes estatales y los jueces le tenían tanta confianza en sus conocimientos que le delegaron la tarea de elaborar los proyectos de sentencia.

Hombre modesto, de pocas palabras, don Faustino se convirtió en asesor de abogados que lo consultaban para que les diera una opinión sobre tal o cual defensa y en reconocimiento a sus múltiples méritos una agrupación de profesionales del derecho lo declaró abogado honorario. Sin haber estudiado derecho en las aulas, era brillante en el tema de las leyes penales. No necesito título para sobresalir.