Tiempo de opinar.

Raúl Hernández Moreno.

Sindicato Nacional de Infraestructura gana maquiladora
-Se trata de Robertshaw
-CTM ha perdido dos maquiladoras en los últimos meses

Con una aplastante ventaja de 4 a 1, el Sindicato Nacional de Infraestructura (SNI) le arrebató el contrato colectivo de trabajo a la CTM, en la maquiladora Robertshaw, en la que los trabajadores con su voto escogieron a su sindicato.
El SNI obtuvo 795 votos contra 186 de la CTM, en las votaciones internas celebradas el 18 de noviembre.
Los trabajadores le tuvieron confianza al gremio que dirige Santos Francisco Hernández, que en poco tiempo se ha consolidado y se ha convertido en una alternativa para los obreros, acostumbrados durante décadas a tener que afiliarse a fuerzas a la CTM y a soportar delegados gandallas y déspotas.
La democracia llegó a las maquiladoras y aguas para el Sindicato de Maquiladoras que debe dejar de ver a los obreros como un instrumento para el beneficio de unos pocos y para venderse al mejor postor en tiempo de elecciones.
Además, el gremio cetemista debe dejar de ser cómplice de los patrones y asumir el rol a favor de los trabajadores. Debe dedicarse a defender los derechos laborales de sus agremiados y no a destinar el tiempo a convivir con los directivos de las maquiladoras. Esto se necesita, pero no es lo principal.
En junio, la CTM también perdió el control de la maquiladora Industrias Rheem, a manos del Sindicato Nacional Independiente de Trabajadores de Industrias y Servicios, cercano a la polémica diputada Susana Prieto.
Robertshaw se puede convertir en la primera de varias o muchas maquiladoras que opten por dejar al Sindicato de la Industria Maquiladora, ante los abusos de los delegados. Nada es para siempre y hasta el imperio romano se desmoronó por no haberse reinventado a tiempo.
Hoy el gremio cetemista mantiene el control de la mayoría de las maquiladoras, pero eso no significa que sea para siempre.
La perdida de Industrias Rheem y Robertshaw, es un golpe al ego cetemista y a sus bolsillos. Y además le resta poder de negociación en la siguiente elección. Una cosa es que el sindicato pueda movilizar a miles para que asistan a un evento y otra que el 100 por ciento sigan las instrucciones de su secretario general. Y esto lo va analizar el próximo partido al cual el Sindicato de Maquiladoras de la CTM le ofrezca su “capital”. Capital, que por cierto, ya le coquetea al ex diputado Manuel Canales Bermea que quiere ser candidato a la presidencia municipal por el Movimiento Ciudadano.
El Movimiento Ciudadano está convencido de que si reúne a personajes conocidos por la sociedad civil y le invierte dinero a la campaña, puede ganar la próxima elección o por lo menos desplazar al PAN y convertirse en la segunda fuerza electoral.
Pero una cosa es decir y otra hacer. De proyectos y planes está plagada la sociedad. Lo importante es que esos planes se concreten y que se puedan evaluar. En fin, hay que darle tiempo al tiempo.