Acostumbrarse a la «mala vida».
Evaristo Benítez Castro.
Con un poco de pena y con las reservas del caso, quiero comentarle un sentimiento muy íntimo, de forma discreta, con el debido hermetismo y que quede sólo entre usted y yo pero….
¿Se ha dado cuenta de que en la mayor parte de la capital del estado de Tamaulipas tenemos 48 horas sin agua potable en las llaves y no ha habido protestas ni privadas ni públicas por dicha deficiencia en el servicio público de la ciudad?.
Como que nos estamos acostumbrando a la mala vida; la autoridad municipal ya gastó sus tradicionales argumentos para justificar dicha anomalía y pareciera que llegamos a aceptar casi con gusto esas argumentaciones:
Por ejemplo que se cortó el servicio eléctrico que activa el sistema de bombeo, que se rompió una tubería que proviene de la fuente principal de abastecimiento del vital líquido, que «tronó» el motor X y decenas de explicaciones similares que fundamentan la ausencia de agua potable en las llaves de la ciudad.
Vaya hasta las redes sociales antes generosas en las críticas a la autoridad municipal por tan lamentable situación de carencia de agua potable tan frecuente y prolongada, pero guardan un discreto silencio.
Por eso le digo, y le insisto de manera discretísima, que nos estamos acostumbrando a la mala vida y tenemos un muy alto nivel de tolerancia.
De hecho y sin mala intención, pero debo de comentarle también que nuestras autoridades municipales se sienten tan tranquilas y satisfechas por su eficiencia como servidores públicos, que ahora buscan competir de nuevo en el proceso electoral en marcha.
El alcalde mínimo repetir en el cargo; sus allegados quieren ser legisladores y así sucesivamente su equipo con alegría se está inscribiendo para participar en el proceso electoral interno de MORENA.
Quienes somos mandilones desde luego que palpamos en toda su dimensión esa negligencia casi criminal. Lavar trastes, tus calzones y similares actos casi íntimos llegan a ser una tarea milagrosa: con cubetas y botes debes asumir tus «responsabilidades» familiares.
¿Y la autoridad?; en campaña, no os preocupeis que la gente aguanta vara pues se acostumbra rápido a la mala vida.
Es probable que la dinámica política por la que pasamos en el estado y país, derive en nuestra adaptación a esa vida de carencia de agua, a la actual despreocupación, al actual conformismo pues…¿Qué gano con protestar si sería una voz en el desierto?.
Será la Santa Misa el caso es que nuestras negligentes autoridades (del ámbito federal, estatal y municipal) ya le tomó la medida al ciudadano promedio; al ciudadano estoico que es (¿seguirá?) fiel a MORENA y asociados partidistas, pues ellos aseguran con mucha confianza que seguirán gobernando porque «la oposición no existe y el pueblo nos quiere».
Desafortunadamente pueden tener razón esas damas y caballeros optimistas; si un problema tan sensible como lo es la falta de agua potable en Ciudad Victoria durante más de 48 horas, NO PROVOCA ninguna protesta de la sociedad, pues la situación político-social de la comunidad es clara y contundente:
Ya nos acostumbramos a la mala vida; hagan lo que quieran de nosotros, aun con los calzones «manchados».
Cd. Victoria Tamaulipas. Domingo 5 de Noviembre de 2023. Evaristo Benítez Castro en Faena en Canal.