-La historia es cíclica
-Estamos viendo una repetición del 2018 y 2021
-Faltan dos instancias para que el caso se cierre
El Tribunal Estatal Electoral desechó la impugnación que presentó el PAN solicitando la anulación de la elección del 2 de junio y ratificó el triunfo de Carmen Lilia Canturosas, quien dé está manera se anota su tercera victoria.
Carmen Lilia obtuvo su primera victoria la madrugada del lunes 3 de junio, cuando se impuso en el Programa de Resultados Preliminares (PREP); después volvió a ganar el 8 de junio, cuando terminó el recuento voto por voto, en las 567 casillas instaladas en la jornada electoral. Ahora obtiene una tercera victoria, avalada por el Tribunal Estatal Electoral.
Al PAN le quedan dos instancias para inconformarse, la Sala Regional del TRIFE, con sede en Monterrey, y la Sala Superior del Poder Judicial de la Federación. La elección de Nuevo Laredo, no es un caso cerrado, como erróneamente lo manejaron algunos medios de comunicación.
Estamos viendo, pues, la repetición de lo que ocurrió en el 2018 y 2021, cuando en la primera elección Morena pidió la anulación de la elección y en la segunda hizo lo propio el PAN.
En el 2018, el Tribunal anuló los resultados en 49 casillas e invalidó 31 mil 859 votos. El PAN perdió 11 mil 267 votos y Morena 8 mil 922. Al final se concedió el triunfo al PAN con 47 mil 755 votos y a Morena 40 mil 614.
En el 2021, la coalición Morena-PT ganó con 64 mil 629 votos y el PAN se quedó con 62 mil 477. Fue una diferencia de 2 mil 152 votos, equivalentes al 1.46 por ciento y el Comité Municipal Electoral decidió abrir y contar todos los paquetes, para dar certeza a los resultados. En el recuento se confirmó la victoria de Morena-PT y después hicieron lo propio el Tribunal Estatal Electoral, la Sala Regional del TRIFE en Monterrey y la Sala Superior del Poder Judicial de la Federación.
En el 2018 y el 2021, el partido inconforme agotó todas las instancias y la Sala Superior emitió su resolución el 30 de septiembre, horas antes de tomar posesión el nuevo gobierno municipal, lo que mantuvo encendida la llama de la esperanza de los opositores para que se anulara la elección.
La historia es cíclica, estamos viviendo la misma película del 2018 y 2021, pareciera un deja vu y sin embargo es real.
La elección de Nuevo Laredo no está cerrada. Hay dos instancias más a las que pueden recurrir los inconformes. Tenemos que esperar al 30 de septiembre y eso, obviamente, mantendrá encendida la llama de la esperanza para los opositores, igual que pasó en el 2018 y el 2021.
Ante el TRIFE primero y luego ante la Sala Superior, el PAN insistirá en que se anule la elección y se repita. Por lo pronto una de los cinco magistrados electorales estatales estuvo a favor de anular 5 de las 567 casillas. El problema es que la Ley de Medios de Impugnación para Tamaulipas establece como una de las causales para anular la elección, que se confirmen irregularidades en el 20 por ciento de las casillas instaladas, es decir, en 113 de las 567 que se instalaron el 2 de junio.
Hay otras causales, por supuesto. En todo caso el PAN debe convencer a los magistrados del TRIFE que hubo irregularidades en la jornada electoral, suficientes y abundantes para que se ordene anular la elección. No va a ser fácil, pero tampoco es imposible.
Una regla no escrita en el derecho electoral es que la anulación de la elección es un caso excepcional, no una regla.
En cada nueva elección, el partido inconforme suele quejarse de que hubo un cúmulo de anomalías que hacen necesario revertir los resultados. Pero una cosa es decirlo y otra comprobarlo, además de que en el derecho electoral la carga de la prueba le corresponde al denunciante.
Carmen Lilia sigue firme en su victoria con 94 mil 584 votos y 89 mil 967 del PAN. Hay una diferencia de 4 mil 677 votos a favor de la morenista.
Todavía se tendrán que agotar las dos instancias legales. El PAN insistirá en la anulación de la elección y Morena defenderá su triunfo.