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Asoma elección tipo
“indios y vaqueros”
· – . Cada vez más difusos los partidos políticos ante el arribismo de “adoptados”
· – . Odio y agresiones dominan el país, un reflejo de descrédito a la autoridad
· – . Yahleel y la oportunidad de reconquista; la torpeza de diputaos ante CLCR
Por Javier Claudio
Claridades. – Innegable, el nuevo antagonismo de la política dejó de ser “de caballeros” y pasó a la confronta abierta y sin medida, pues es realmente lamentable observar cómo hoy se pierde esta actividad en el odio y el rencor. Absortos en la búsqueda de aquello que nos encienda el optimismo, nadie se puede sustraer a la serie de incidentes de violencia donde queda muy en claro que los autores parecen remarcar con agresivas acciones la pérdida de fe en la autoridad y la acción de justicia.
Claro que sí. – La desesperanza permea y no es tan similar como la de sexenios anteriores, pues entonces siempre prevaleció la consciencia de un engaño más al pueblo, sólo que con Andrés Manuel López Obrador el voto de confianza fue casi total y el escamoteo del oficialismo del que fue objeto para ceñirse la banda presidencial, tomó un súbito curso, como fue el aprobarle la oportunidad de cambiar a nuestro México, pero dejémoslo mejor en el argumento de que fueron muchos los sexenios de corrupción.
Clarín. – Más difuso que nunca el panorama de “indios y vaqueros” en la política, donde lo único que queda claro es que dejó de existir la convicción partidista, la lealtad y los principios. No hay aparente roble que no caiga al ser corroído por los intereses y alcanzar acomodo para asegurar beneficio, y no séase el partido que sea, sino en este caso Morena, el situado en el poder. Así el PRI, vacío el otrora gran buque, casi a la zozobra y acomodados los sobrevivientes en regidurías, también se va Cristabel.
Aclarando. – Un celo político de lo más torpe, es aquél que han mostrado los diputados para con el alcalde en turno, pues de cumplir con un verdadero espíritu de servicio, se integrarían verdaderos equipos de trabajo y facilitar los alcances en un maratón hasta lograr alcanzar gestiones. Si el papel de la alcaldesa Carmen Lilia Canturosas es de gran aprobación y le abrió la posibilidad de reelección, ¿qué más hubiera logrado de haber cerraran filas en torno a ella todos los diputados por NLD?
Claroscuro. – ¿Porque la ciudadanía le resta credibilidad a los organismos e instituciones?; A cuatro años de la entrega inconclusa de los estados financiero de la directiva de la delegación y el “extravío” de propiedades de Canacitra, sigue pendiente la investigación de aquella directiva que estuvo a cargo de Ofelia Guadalupe Garza Delgado. A efecto de este vergonzante hecho, la vicepresidencia nacional de la Franja Fronteriza de Canacintra, “congeló” aquí varios nombramientos, como si fuera castigo.
Claro que no. – Arrebata la atención de este proceso de elecciones la oportunidad que se le brinda a Yahleel Abdala la conquista del voto ciudadano que le permita alcanzar la presidencia municipal, luego de haber perdido por escaso margen ante Carmen Lilia Canturosas. La revancha es sólo de ella, la que adquiere estatura luego de sumársele adeptos que surgieron de aquella cuestionada jornada, amén de que hoy luce un cierre total de filas de seguidores y nuevas estrategias vigilantes del voto.
Clarificando. – En opinión de expertos en el medio aduanero; El Puente Tres del Comercio Mundial no tiene la infraestructura debida para el resguardo y custodia de la mercancía que según la autoridad está embargando debida a la internación ilegal o de alguna manera indebida. En opinión de afectados con decomisos, independiente de los procesos legales que son largos y tediosos más no imposibles, la autoridad siempre estará a la defensiva y nunca, aunque pierda los casos, la autoridad lo reconocerá.
Sabía usted que. – Una nueva crítica a la improvisación se mece sobre la Aduana de Nuevo Laredo, al ser exhibida una “isla” de contrabando diverso en la Plataforma de Importación en el Puente III del Comercio Mundial, donde sólo con acciones de “desdoblamiento” de elementos de la Guardia Nacional y algunos otros más de la Sedena, resguardan la custodia de mercancía que va desde telas finas y flamantes vehículos hasta un sinnúmero de camiones de autotransporte de carga.