Columna Cuentas Claras

        Modalidad de robo;

    los “magos” de la banca

·         – . Desaparecen montos de cuentas bancarias, entre el disimulo y complicidad     

·         – . Transición muy complicada, donde Cabeza de Vaca parece dispuesto a todo   

·         – . Preocupante la cantidad de viviendas creadas mediante la autoconstrucción    

                                            Por Javier Claudio

Claro que no. – Aquello de “no hagas a otro lo que no queras para ti”, aparece practicado al calce y con toda perversidad por Francisco Javier Cabeza de Vaca, como si en dicha acción cobrara venganza de una situación conflictiva cuando asumió el gobierno por Egidio Torre Cantú, porque la verdad estuvo muy distante de ser así y más bien estuvo enmarcado en una camuflajeada camaradería, cuyo trasfondo –la verdad– fue la complicidad en los recursos que se dejaron a medias o bien compartidos.

    Clarín. – Es así ahora que a casi un mes para que asuma como gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal señala al gobierno de García Cabeza de Vaca como la “piedra en el camino”, buscar entorpecer el proceso de entrega-recepción al enturbiarlo, con la finalidad de que “no veamos sus desviaciones”. Con índice de fuego, Américo afirma que Cabeza de Vaca está enfocado en evitar que ciertas áreas estratégicas de seguridad pública queden bajo el control del fiscal estatal Irving Barrios.

Claro que sí. – Los robos de “cuello blanco” no son el nuevo estilo, sino más bien serían la recurrencia de estos hasta alcanzar el hartazgo que, ante el logro de riquezas mal habidas, la impunidad y el alcanzar un falso respeto y espacio en la sociedad, habrían quebrantado la honestidad de muchos hasta hacerlos decidir por incursionar en ese mundo de delitos, ese que hoy nos asfixia y al que nadie parece escapar, séase por experiencia propia, la de algún familiar o bien algún amigo.

Aclarando. – La banca no escapa, debido a los robos cibernéticos contra clientes y que al no trascender ni mucho menos ser investigados, quedan en medio de una gran sospecha, la obvia inconformidad del afectado y que la autoría bien podría desviar hacia los empleados de los bancos. Son recurrentes los casos de este tipo de asaltos a través de los sistemas bancarios, donde nadie es culpable, así tampoco rinde resultados la aparente investigación en el consabido silencio de autoridad y la banca.

Clarificando. – “A mí me desaparecieron 210 mil pesos de mi cuenta, bajo supuestos cargo que jamás hice. Acudí al banco, ahí tomaron nota y a los pocos días me enviaron una carta donde me hacían saber que su rastreo mostraba que sí había hecho yo los cargos a mi tarjeta y eso es falso”, dijo una maestra jubilada de apellido Rodríguez, quien en su ir y venir para reclamar el abuso, terminó por desviar ante una de las agencias del Ministerio Público donde tampoco logró acertaran a esclarecer los hechos.

Claridades. – La atribulada maestra decidió atender la recomendación de una amistad del mismo sector educativo que por igual había enfrentado una situación de robo hacía unos meses atrás y fue entonces que contrató los servicios de una abogada foránea, quien en un tiempo razonable le dio resultados al decidir súbitamente el banco “reponerle” los 210 mil pesos como un acto de responsabilidad hacia su cliente y la intensión plena de redundar por atención al cliente. Entonces, la maestra no los gastó

Claroscuro. – Debe realizarse un arqueo a fondo por parte de las autoridades de investigación, pues todo apuntaría a que la secrecía de los casos de robo de las cuentas de los clientes, no tienen resultados de investigación y que el mismo banco habría “frenado” esto con disimulos para evitar lastimar el buen nombre de la institución. Es así que entones esto apunta a los empleados bancarios, quienes son lo que tiene los datos de los clientes y las claves de acceso interbancarias para realizar todo tipo de movimientos en línea y por supuesto las transferencias “fantasmas”.

Sabía usted que. – Un estudio reciente realizado por la Unión de Profesionistas, Ingenieros y Arquitectos de la Construcción (UPIAC), destaca que en la ciudad se tienen aproximadamente 95 mil viviendas ocupadas por familias y se considera que más del 50 por ciento de estas, o séase casi 50 mil casas son autoconstruidas por sus moradores. lo que implica un indicador de atención urgente a esta forma de obra.

javierclaudio40@yahoo.com.mx