MIGUEL TIMOSHENKOV
LAREDO, TX. – Arroz y frijoles fue el platillo que sirvió el Banco Regional de Comida como un recordatorio de la pobreza donde millones de personas ni estos alimentos se saborean.
Lorena Rodriguez, directora ejecutiva; miembros de la mesa directiva, autoridades locales y ciudadanos compartieron los alimentos.
Adolfo González, de la directiva del primer Banco Alimentario en Laredo Webb, dijo que el símbolo de arroz y frijoles es lo único que las familias locales podrán tener para su alimento diario.
“Durante 42 años hemos celebrado esta tradición que ha permitido, con la bondad de personas y empresas, mantenernos para entregar bolsas de comida a los más pobres”, dijo Gonzalez. “Cuando se abrió el Banco de Comida en 1982 se buscó atenuar la pobreza que estaba asentada en nuestra ciudad y condado”.
La operación del Banco Regional de Comida se sostiene con donaciones de negocios y personas altruistas que están conscientes de la pobreza y que se puede combatir a través de esta institución.
Dijo que la organización Popeyes Chicken les hizo una donación de $10,000 para organizar más bolsas con alimentos para la comunidad.
Diversos grupos durante el año hacen aportaciones que fortalecen a la comunidad.
En Laredo se registra hasta un 30 por ciento del nivel de pobreza de los 270 mil habitantes.