En la red consular de México en Estados Unidos no hubo. respuesta oficial sobre la máxima tensión que el presidente Andrés Manuel López Obrador género en las relaciones diplomáticas.
Despertó inquietudes ¿En qué terreno estamos pisando?, dijeron empresarios del comercio internacional cuando el presidente ha indicado “está en pausa”.
Aunque está claro que la intromisión del embajador de Estados Unidos Ken Salazar, sobre la reforma judicial molestó al gobierno de México.
Los cónsules mexicanos en la frontera de Estados Unidos no tuvieron una versión oficial que sería la misión diplomática a seguir en este tema.
El embajador Salazar habría estado lanzando serias críticas a la administración Morenista porque está condenado la reforma judicial. El gobierno de México busca limpiar la corrupción institucional que por décadas se ha enseñoreado en los impartidores de justicia de México.
El presidente y legisladores mexicanos han indicado que los jueces y magistrados permiten libertad a criminales, narcotraficantes en “Sabadazo”.
A ello el presidente López Obrador ha indicado que el embajador Salazar ha faltado al respeto de la soberanía de MÉXICO al manejar sus asuntos que competen exclusivamente a los mexicanos.
“No se trata de ruptura con la administración Biden. Estas relaciones se restituirán hasta que Washington esté mostrando el respeto a la soberanía de México”.
Se insistió en varias llamadas a los consulados mexicanos a lo largo de la frontera buscando una postura que la cancillería mexicana hubiera fijado a sus consulados o embajada de México en riesgo la democracia. México en Washington, pero no hubo respuesta.