En Voz Alta

¿Va en serio?

Gastón Monge/2173

Tal parece que las demandas que interpuso la actual administración municipal contra funcionarios de la administración pasada van en serio, luego de que en conferencia de prensa funcionarios municipales mencionaran ante reporteros que el ex presidente municipal Enrique Rivas Cuellar y los dos síndicos de su administración, Dorina Lozano Coronado y Santiago Sáenz, son presuntos responsables de mal manejo de los recursos financieros municipales.

Ello debido a la compra de unos terrenos en donde se construiría un Centro de Convenciones y el World Trade Center, obras que por alguna razón fueron canceladas, de lo que no se ofreció explicación alguna, y tampoco del dinero que se invertiría en dichas obras.

De ser ciertas estas acusaciones, y peor aún, de ser comprobadas con documentos y testimonios, estos ex funcionarios estarán en serios problemas con la justicia, ya que se tienen que presentar ante un juez de control para rendir sus declaraciones en torno a este caso, y explicar en detalle que fue lo que obligó a cancelar los proyectos, y a rendir cuentas del dinero que fue utilizado para la compra de los terrenos.

Sobre los hechos, el ex alcalde dio la cara en una grabación publicada en redes sociales, en la que se auto exonera al decirse inocente de dichas imputaciones, y por el contrario, menciona que se trata de una persecución política en su contra porque durante su gestión las cosas se hicieron bien, y que el dinero utilizado para esos proyectos, fue bien invertido.

Pues bien, si así lo dice, es tiempo de que demuestre su inocencia con documentos, facturas y testimonios, para que de una vez por todas todo ese embalaje de acusaciones y señalamientos que la actual administración ha hecho en su contra se comprueben o se desechen.

Van 17 meses de la presente administración municipal, y desde el primer minuto los funcionarios municipales se comprometieron a combatir la corrupción y el bandidaje que dicen, se cometió en el gobierno municipal anterior, y si las pruebas que mostraron en la conferencia de prensa son tan sólidas como dicen, pues adelante, que intervengan las autoridades y que actúen contra quienes atenten contra el patrimonio financiero de la ciudad, incluyendo a los funcionarios de la administración actual, que a fin de cuentas el dinero es de todos los neolaredenses.

Pero existe la probabilidad de que este espinoso caso quede impune y se resuelva de la misma manera como hasta el momento ha resultado con el ex gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca, quien fue exonerado por las autoridades de todos los delitos que el gobernador Américo Villarreal lo responsabilizó desde que tomó el cargo.

Caso similar ocurrió con la presunta autora de la Estafa Mayor, Rosario Robles quien se en cuenta en plena libertad sin que las autoridades de Morena le hayan comprobado los delitos que se le fincaron, aunque tampoco han investigado en donde se encuentran esos mil 500 millones de pesos que fueron supuestamente entregados a los programas surgidos de la Sedesol y después de la Sedatu.

Lo más probable es que en el caso del ex alcalde Enrique Rivas ocurra lo mismo; circo, maroma y teatro, y junto con los dos síndicos sigan gozando de cabal salud, como hasta ahora. ¿No cree usted amigo lector? 

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Ayer se realizó una edición más del Día Internacional de la Mujer, un evento que no tiene por qué ser festejado y mucho menos celebrado porque no hay nada que celebrar, debido a que hasta el momento las mujeres siguen siendo explotadas, ninguneadas, mancilladas, golpeadas, olvidadas, vituperadas, violadas y hasta asesinadas ante la tibia mirada de las autoridades que poco o casi nada hacen para prevenirlo, toda vez que el 95 por ciento de los casos queda en la completa impunidad.

Pese a ello, en todo el país salieron las féminas a las calles y de diferente manera se solidarizaron consigo mismas; fueron sororas y resilientes, conceptos que las hacen más fuertes, más combativas y más conscientes de su situación de explotación en todos los ámbitos de la vida social, laboral y política en este país históricamente machista.

Pero también existen las que son más invisibles que las demás, las que no se ven no porque no quieran, las que no gritan no porque no tengan voz, y las que no marchan no porque no las dejen. Se trata de aquellas migrantes que caminan contra su voluntad en busca de un sueño que la mayoría de las veces se convierte en pesadilla; de las mujeres que hacen trabajos domésticos en casas que no son las suyas, de las madres de los miles de desaparecidos que no gritan porque se han quedado sin voz, de las que no lloran cuando son golpeadas porque sus ojos ya están secos.

Pero todas, sí, todas las mujeres, desde sus propias trincheras día tras día luchan, caminan, gritan y levantan las manos no para protestar, sino para demostrar que aún siguen siendo mujeres pese a toda esa adversidad que trata de impedírselos.

Mujeres al fin y al cabo, un género que poco a poco va ganando terreno a los hombres en un marco de lucha y de igualdad en cuanto a oportunidades y derechos, porque una mujer que sabe ser mujer ante los ojos de los hombres, siempre estará más cerca de su libertad y de su emancipación.

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Voz Migrante. En Tamaulipas existe una dependencia que desde que fue creada no cumple con la función que debería tener. Se trata del Instituto Tamaulipeco del Migrante, un organismo estatal que por razones inexplicables se trasladó a la capital estatal, quitándole ese derecho a Nuevo Laredo, municipio que lo tuvo desde sus inicios.

En esta frontera se creó este organismo estatal porque esta es la ciudad por donde más migrantes cruzan, o cruzaban, y que llegaban a este instituto para recibir apoyo, orientación alimento y su traslado a sus lugares de origen.

Así funcionó durante mucho tiempo, hasta que el gobierno federal, el actual, decidió cancelar el apoyo que tenía, de 300 millones de pesos anuales, a solo 26.3, insuficiente para ofrecer toda la ayuda que requieren estas personas que llegan desde el sur, o que son deportadas desde Estados Unidos.

El último año que funcionó este instituto fue el primero del presidente López Obrador, y ese año fueron deportados 42 mil migrantes por Tamaulipas, la mayoría por Nuevo Laredo, a quienes se les otorgaban mil pesos para un boleto de autobús que los llevara hasta sus comunidades de origen; pero ahora los dejan a su suerte porque los refugios son insuficientes e ineficientes.

Y así como ya no existe el Fondo de Apoyo al Migrante, muchos programas orientados a ellos, desaparecieron también, y ahora que ya no existe este organismo, la suerte de los migrantes sigue siendo muy incierta, y más aún cuando el gobierno del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pretende detener a familias completas, y deportarlas con todo y niños, una vez que el Título 42 termine el 11 de mayo de este año.

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Hasta mañana

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